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Nuestro compromiso con la naturaleza y la humanidad nos ha llevado, naturalmente, a establecer asociaciones a largo plazo con nuestros proveedores de recursos vegetales. Se basan en los principios del comercio justo para desarrollar cosméticos éticos. Nuestras cadenas de suministro reflejan nuestro compromiso en el día a día, así como el cuidado puesto en el diseño de cosméticos responsables con el medio ambiente, que tienen sentido tanto para quienes los usan como para quienes participan en el proceso de fabricación.
Estas asociaciones justas son uniones con hombres y mujeres apasionados por su tierra y el desarrollo de sus comunidades. Comenzando con la manteca de karité en Burkina Faso hace más de 15 años, nuestro compromiso crece cada año con nuevos proveedores éticos. Como fabricante de cosméticos sostenibles y beneficiosos para todos, establecemos asociaciones personalizadas con el objetivo de respetar el medio ambiente, preservar la biodiversidad y el bienestar de quienes lo cuidan.
Gracias a estas relaciones sostenibles y solidarias, podemos garantizar la realización de proyectos de desarrollo local y la selección de materias primas excepcionales para la cosmética ética. Todo ello sin dejar de garantizar la conservación de los conocimientos tradicionales y su transmisión.
Garantizar una manteca de karité de calidad inigualable, al tiempo que se trabaja por la autonomía económica y social de sus agricultores en Burkina Faso.
Obtención de un principio activo con propiedades estimulantes excepcionales, al tiempo que se asegura el trabajo de los pequeños agricultores y se participa en la lucha contra la deforestación en Brasil.
Proporcionar aceite de argán de una calidad ancestral poco común, al tiempo que se promueve la alfabetización y la posibilidad de trabajo para sus agricultores en Marruecos.
Proporcionar un ingrediente activo con valiosas cualidades protectoras, al tiempo que se lucha contra la malnutrición mediante un amplio programa de apoyo agrícola y alimentario en Madagascar.
El aceite esencial de limón orgánico se extrae de limones ecológicos cultivados en Sicilia. René Furterer se ha comprometido con la agricultura orgánica para ayudar a proteger el medio ambiente y garantizar la calidad de nuestros productos de cuidado.
La planta es la raíz de todo. Ha sido nuestra inspiración desde el principio de nuestra marca. Nuestro enfoque, como marca comprometida y responsable con el medio ambiente, se basa en el respeto y la sostenibilidad de los recursos. Las plantas que están en el corazón de nuestros proveedores éticos son un recurso valioso que permite a las comunidades locales vivir de su cosecha y transformación. Pueblos enteros dependen de estos recursos y nosotros nos comprometemos a contribuir a su prosperidad y desarrollo.
La moderación y la responsabilidad son fundamentales: cosechamos las plantas en su hábitat natural y solo recogemos lo que necesitamos para garantizar la supervivencia de la especie a largo plazo. Trabajamos con quienes han preservado y valorado estos preciosos recursos naturales durante generaciones. Gracias a ellos tenemos acceso a estas plantas y nos esforzamos por honrar este privilegio ayudándoles a vivir mejor.
Estamos convencidos de que los conocimientos ancestrales sobre los métodos de recolección y la producción de materias primas son un verdadero tesoro que hay que preservar. Este conocimiento compartido es único y ha guiado la producción de mantecas, aceites y otros extractos de plantas de calidad inigualable durante siglos. Como marca comprometida con la cosmética ética, apoyamos a los proveedores de producción que valoran el talento de los hombres y mujeres con los que trabajamos.
Para nosotros, una marca de cosméticos respetuosa con el medio ambiente debe apoyar a sus socios en el desarrollo de métodos y técnicas que les ayuden a mejorar sus herramientas de producción y a reducir su duro trabajo. Respetando las técnicas ancestrales, el apoyo técnico y la puesta en común de las habilidades es como proporcionamos apoyo a largo plazo para que sus actividades crezcan. Y les orientamos sobre cómo obtener las mejores certificaciones para valorar su trabajo y la calidad de los procesos puestos en marcha.
Todos nuestros proveedores son de comercio justo y de agricultura ecológica, certificados por ECOCERT. El sello Fair For Life, emitido por el organismo, es una certificación rigurosa que valora las iniciativas adoptadas por todos los actores, con la marca de productor. Esta certificación es el reconocimiento de una relación justa a largo plazo, que permite asegurar los suministros, por un lado, y mantener el empleo y las condiciones de trabajo, por otro.
Como marca comprometida a largo plazo con sus socios, garantizamos las condiciones para ayudarles a crecer con confianza. La estructura de estos proveedores nos permite asegurar la trazabilidad de los ingredientes y garantizar la calidad de los principios activos de nuestros cosméticos éticos.
Comprometerse con la cosmética ética también significa invertir en las comunidades locales. Las empresas con las que establecemos asociaciones a largo plazo son cooperativas, familias, pueblos y regiones a las que apoya nuestra acción.
Nuestros proveedores prestan un fuerte apoyo a proyectos locales, como la lucha contra la deforestación y la malnutrición, la conservación de las tierras de los pequeños agricultores y el desarrollo de la independencia financiera y social de las mujeres.
Somos una marca comprometida con la sostenibilidad a largo plazo: trabajamos por el bienestar de los hombres y las mujeres y por preservar nuestro planeta a diario.
