Una gama de productos para el cuidado del cabello seco con manteca y aceite de karité
La manteca de karité es el principal producto de los frutos del árbol del karité. El karité se encuentra en toda África tropical, desde Malí hasta Sudán y Burkina Faso, donde es un árbol de la suerte. El Butyrospermum parkii, cuyo nombre antiguo significa literalmente "semillas de mantequilla", produce nueces con granos carnosos de los que se extrae, mediante presión mecánica, una de las grasas vegetales más utilizadas y asequibles en el Sahel. En su versión refinada, esta grasa, producida exclusivamente por las mujeres, se utiliza como margarina en la dieta subsahariana.
Pero la manteca de karité ha llegado a nosotros y a nuestros cosméticos en su versión cruda. Apreciada por sus propiedades hidratantes y su capacidad para combatir la sequedad de la piel y el cabello, es fácilmente reconocible por su color amarillo verdoso, cuando no está purificada, y su aroma con notas de almendra. Se encuentra en bloques envueltos en hojas en los mercados africanos, una forma que permite almacenarlo durante años si no se expone al aire y al calor.
¿Es mejor la manteca de karité que otros ingredientes para el cuidado del cabello? ¿Cuáles son sus beneficios para el cabello seco?
En resumen: sí. Las razones de su éxito se pueden resumir en tres palabras: textura, composición y propiedades. Al tacto, la manteca de karité es un tesoro de sensorialidad: cremosa, fácil de aplicar, especialmente en cabellos muy gruesos, se incluye en muchas fórmulas, haciéndolas irresistibles, densas y ricas.
Pero es en términos de composición donde la manteca de karité realmente marca la diferencia: con casi un 10% de materia insaponificable (esa parte insoluble y no transformable que retiene los principios activos más interesantes), aplasta a la competencia, que generalmente tiene alrededor de un 1%. Desde las vitaminas A y E (antioxidantes), el kariteno (anti-UV) hasta los alcoholes triterpénicos (antiinflamatorios), la manteca de karité está llena de moléculas científicamente probadas. Los ácidos grasos esenciales, clave para el funcionamiento de la piel e imposibles de sintetizar por el ser humano, también están presentes en grandes cantidades en la mantequilla, lo que justifica su valor nutricional.
Además de estas magníficas cualidades, también se distingue de los aceites por su facilidad de aplicación, su capacidad para proteger y envolver la fibra capilar con una película lipídica nutritiva y su efecto de cobertura que limita la transpiración y, por tanto, la deshidratación. En contra de la creencia popular, no hace que el cabello crezca más rápido, pero sí ayuda a hidratarlo en profundidad y a protegerlo de las agresiones externas, ¡que ya es mucho!
Karité y Karinga: las gamas de tratamiento a base de karité
René Furterer ha desarrollado tres gamas de productos para el cuidado del cabello que responden a las necesidades de nutrición e hidratación del cabello seco:
- La gama KARITÉ Hydra, dedicada al cabello seco
- La gama KARITÉ Nutri, diseñada para cabellos muy secos y quebradizos
- La gama KARINGA para cabellos encrespados y muy rizados
Repletas de hidratación y nutrición, contienen manteca de karité, que ayuda a reducir la sequedad del cabello. Tu cabello se volverá más hermoso.